La automatización de tareas es una de las características más interesantes que nos puede ofrecer la robótica. Por ello, en algunos sectores como la construcción se están desarrollando sistemas robóticos que optimicen los procesos constructivos.
Podemos hablar de varios tipos de maquinaria robótica, pero básicamente se dividen en aquellas que necesitan el apoyo de una persona para funcionar y en aquellas que son totalmente autómatas e independientes. Algunos de ellos incluso tienen su propio nombre y realizan tareas específicas. Nos podemos encontrar con el Robot Hadrian, destinado a la colocación de ladrillos y construcción de muros y que puede llegar a colocar 1000 de estas piezas por hora. Y en el lado opuesto tenemos a Husqvarna DXR250, cuya misión es la destrucción de paredes y columnas.
Por tanto, en los últimos años se ha llevado a cabo un desarrollo de toda esta tecnología que facilita el trabajo en la construcción; estas nuevas herramientas proporcionan mayor precisión, productividad y seguridad. Se están desarrollando complejos sistemas que abarcan todos los niveles, desde el ensamblamiento de piezas hasta la inspección de un acabado. También está surgiendo la utilización de drones para explorar zonas de difícil acceso y obtener imágenes que de otra manera sería muy complicado.
¿Pero llegará un momento en que esta maquinaria nos quite el trabajo? Está claro que los robots son más eficientes, trabajan más rápido y a largo plazo son más baratos. ¿Pero realmente pueden competir con el trabajo que realiza una persona? El miedo a ser reemplazados por máquinas comenzó con la revolución industrial y actualmente hay dos corrientes de pensamiento: una cree que para dentro de unos 10 años muchos de los actuales puestos de trabajo los realizará una máquina y la otra opina que la utilización de robots ayudará a crear más puestos de trabajo. Lo que está claro es que si un proceso se puede automatizar lo hará un robots pero para aquellas tareas que requieran de creatividad o de innovación se necesitan personas… ¿o no? Ya veremos lo que nos depara el futuro y la inteligencia artificial.